Espaguetis al limón
Descubre el sabor fresco y gourmet de los espaguetis al limón, una receta que personifica la excelencia de la cocina italiana con un toque moderno y saludable. En Garofalo, nos enorgullecemos de ofrecer pastas de calidad superior que realzan cada ingrediente, y este plato no es la excepción. Los espaguetis al limón combinan la textura perfecta de nuestra pasta con el aroma cítrico del limón, creando una experiencia culinaria que deleita los sentidos.
Esta receta, que utiliza linguine finamente elaborados, se enriquece con mantequilla, aceite de oliva virgen extra y la frescura de la menta. El toque final lo proporciona la burrata suavemente deshecha sobre los espaguetis, un queso que su textura cremosa complementa maravillosamente la ligereza del limón y la menta. Acompañados de una copa de vino blanco, los espaguetis al limón de Garofalo son el plato estrella que no puede faltar en tu mesa, especialmente en fiestas como Navidad.
20'
2
Baja
Ingredientes
200 gr Linguine Garofalo
50 gr mantequilla
Aceite de oliva virgen extra (AOVE)
Unas hojas de menta
Pimienta
Sal
1 Burrata
1 limón
Productos Garofalo
Preparación
Preparación de los Ingredientes
Antes de comenzar a cocinar, es esencial preparar todos los ingredientes para asegurar un proceso fluido y sin interrupciones. Reserva 200 gramos de linguine Garofalo y ralla la cáscara de un limón, asegurándote de obtener solo la parte amarilla para evitar amargura. Lava unas cuantas hojas de menta y sécalas bien. Por último, prepara 50 gramos de mantequilla y ten a mano tu aceite de oliva virgen extra, pimienta y sal.
Para la burrata, asegúrate de que esté a temperatura ambiente para facilitar la extracción de la stracciatella, la parte cremosa del interior. Al tener todos los ingredientes listos y a mano, el proceso de cocinado será más eficiente y el resultado final será un plato delicioso y bien equilibrado. Este paso no solo optimiza tu tiempo en la cocina, sino que también te permite concentrarte en la calidad de cada elemento del plato.
Preparación de la salsa
Comienza derritiendo 50 gramos de mantequilla con un chorrito de aceite de oliva virgen extra en una sartén a fuego medio. Esta base grasa no solo aporta sabor, sino que también ayuda a que los aromas de los otros ingredientes se liberen y se mezclen perfectamente. Añade la ralladura de un limón entero, asegurándote de que solo sea la parte amarilla para evitar amargores. Incorpora unas hojas de menta fresca para un toque de frescura que contrasta maravillosamente con el cítrico.
Salpimenta al gusto para equilibrar los sabores y deja que la mezcla se cocine brevemente, solo lo suficiente para que los ingredientes se integren sin perder sus propiedades. La salsa será la base en la que luego se integrará la pasta, creando un equilibrio perfecto entre lo cremoso de la mantequilla y lo aromático del limón y la menta.